Rostro grasoso y como evitarlo.

Que tu rostro tenga un brillo natural es sinónimo de una piel saludable, sin embargo si sientes que tu rostro está demasiado oleoso, alerta es señal de que algo malo está pasando.

A pesar de que hay personas con la piel grasa es evidente cuando algo anda mal, ya que los poros se abren completamente y el exceso de sebo es insoportable.

Antes que nada, te comento que en estas líneas no vas a encontrar respuestas mágicas ni productos milagrosos, sino que voy a compartir algunas teorías de lo que te puede estar ocurriendo pues cada piel es diferente, cada ambiente donde puedas estar es diferente, si deseas un diagnóstico de tu piel lo más indicado es visitar a un Médico Dermatólogo.

Posibles causas:

Deshidratación: es un problema común en todos los tipos de piel. Sino estas usando un gel, crema o serum hidratante definitivamente es probable que los lípidos en tu piel por estar deshidratados no pueden retener agua y en consecuencia generan sebo.

Puedes identificar una piel deshidrata porque tiene un aspecto cansado, con zonas irritadas y aspecto rojizo, irritación en las aletas de la nariz.

Exceso de limpieza: debes saber que tu piel tiene un aceite natural que no es malo, pues te protege de las arrugas y contra las agresiones ambientales: viento, sol y polvo. Sin embargo, no debes excederse en el número de veces que se limpia la piel. Las glándulas sebáceas podrían recibir el mensaje equivocado y producir aún más grasa. Limpiar tu rostro dos o tres veces son suficientes. Evita los astringentes con mucho alcohol porque al resecar la piel, las glándulas reaccionan produciendo más aceite.

Estrés: este también puede ser uno de los causantes y responsable de que las glándulas sebáceas trabajen más de lo ideal causando un brillo indeseado.

Falta de sueño: Aunque no lo creas, si tienes la costumbre de no dormir al menos 8 horas, de desvelarte, esta es una causa de lo que ocurre con tu piel.

Ahora analiza tu cual de estas causas pueden estar afectando a tu piel, quizás todas ;), la forma correcta de poner manos a la hora es comenzando, comienza por cambiar hábitos, crear disciplina al momento de cuidar tu piel además de invertir en productos para cuidar tu piel.

¿Qué hacer para controlar?

Toma agua: es importante estar hidratada. Si bebes la cantidas suficiente de agua, notarás que tu piel luce sana y sin exceso de grasa. Aplica un hidratante a tu piel.

Rutina de cuidado facial: si hasta el momento no tienes la costumbre o la disciplina de cuidar tu rostro, comienza ahora, antes que los daños den tu piel sean irreversibles.

Descansa: duerme tus ocho horas.

Polvos matificantes: si tienes una reunión importante, puedes usarlos. Pero, colócalos con una brocha gruesa en puntos estratégicos como la Zona T (frente, nariz y barbilla) y con pequeños golpecitos. Eso sí, ni bien terminas, límpiate el rostro, quedarte todo el día con maquillaje puede dañar tu piel.

Acude a un dermatólogo: si notas un exceso de grasa, es mejor acudir al especialista y descartar algún problema mayor.

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